Soy incapaz de estar una hora delante de la tele y en cambio podría pasarme una eternidad contemplando como se esconde el sol detrás de las montañas.
Imagino que eso lo podréis ver en las fotos que vaya dejando por aquí. No serán las mejores que hayáis visto jamás, espero que tampoco las peores. Son las postales de mis paseos, las ventanitas a las que me asomo a ver las puestas de sol, y los amaneceres, los días de lluvia, las nubes, las playas , los bosques, las ciudades... las cosas cotidianas que me rodean,
simplemente eso , mis "VENTANITAS DE ENTRETIEMPO".

viernes

ROMA
















*** Dos paseantes distraidos
han conseguido que el reloj de arena,
de la pena pare, que se despedace,
y así seguir el rumbo que el viento trace.***

En el avión de vuelta, cansados , la Anna se queda dormida.
En mi mp3 suena Jorge Drexler y yo, pienso en como me gustaría poder quedarme unos cuantos dias más callejeando por Roma.
Me quedo con sus calles estrechas llenas de texturas, donde todo parece que se vaya a caer. Sus helados, el increible café, (pues sí no es un tópico, vaya café más bueno, ¡ oiga !), sus "autos locos", sus gentes, la luz, los colores, la pasta, la pizza y esa extraña pero agradable sensación de caos que tiene toda la ciudad.
***
Si alguna vez me pierdo, buscadme sentado en una terracita del Trastevere, puede que una tarde tengais suerte y me encontreis, con la Anna, tomando un expresso macchiato y un capuccino, viendo como el sol se esconde tras las colinas.


Roma: otor lugar donde volver